Paseo por el Delta en un barco de mediados del Siglo XX.
El Delta del Paraná, misterio y magnifico, hogar de flora y fauna silvestre, un río tan extenso como las historias que alberga. Desde los versos de los guaraníes dedicados al colibrí hasta el recreo donde encontró su final Lugones, pasando por las casas-museo de Sarmiento y César Bruto, se impone el gran manto marrón sobre el que el sol pega todavía algunos latigazos.
Bloques de hojas formados por casuarinas viejas, altas y elegantes, intercaladas con ramas casi peladas se entremezclan en el cimarrón de manchas tupidas rojizas y ocres, atravesadas de vez en cuando por rectas tajantes.
La naturaleza de las islas en Tigre –la isla, como le dice la gente de esta ciudad– ofrece ahora, en otoño, esas vista artística, escenarios de cuento, soñados e inspiraciones de los mejores cuentos de Cortázar y Roberto Arlt.
Cassa Lepage le propone un paseo histórico por sobre el Delta en “Afrodita”, una antigua chata isleña construida a mediados del siglo pasado, hoy completamente remodelada. Brindando una experiencia de lujo digna de una historia que contar al regresar a casa.
En este recorrido, también entre juncos, camalotes y muelles custodiados por perros, siempre hay algo por descubrir. Sea participe de la contemplación al río “color de león” como dijo Leopoldo Lugones antes de su tragico final. Aquí podrá zambullirse en la tranquilidad y la paz de la naturaleza, dejar atrás la jungla de cemento y dejarse acariciar por la brisa del sudeste, mientras lo seduce aquello que los isleños llaman, con poesía propia, “el mal del sauce”.
Es en ese momento, cuando comience a experimentar sensaciones que nunca antes habían conocido. Las tensiones del cuerpo descienden y se comienza a percibir el aroma de las plantas, los sonidos de los pájaros, la tierra húmeda por las mañanas, la neblina que se disipa al calentar el sol, dejando expuesta una masa homogénea de verdes, la calma que transmite el río, el mate caliente sobre el muelle y mientras tanto todo pasa a formar parte de ese clima de equilibrio y total armonía.
Es así como el mal del sauce se apodera de las personas y comienzan a percibir ese olor de las hojas secas del álamo humedecidas a la mañana.
Prometemos que de esta experiencia, le costara irse del Delta. Hay quienes dicen que los más seducidos llegan a instalarse en forma permanente y no llegan a poder irse nunca y si tienen que irremediablemente irse viven con una nostalgia eterna .
¡Nosotros hemos sido hechizados!
Seguimos encantados bajo el canto de los grillos, el olor a arcilla y tierra mojada, los multicolores primaverales, los niveles del agua desde el muelle, el olor a pino, el mate y los pies húmedos del rocío.
Sinceramente, cuando usted también sea hechizado no querrá, como nosotros, cura alguna.
¿Dónde queda?
El recorrido se realiza en el Barco “Afrodita” desde el muelle ubicado en 9 de Julio 30, San Fernando, Buenos Aires.
¿Cómo puedo reservar un recorrido?
Puede realizar las reservas en la recepción de Cassa Lepage o visitando la pagina web: http://paseosenbarco.com.ar/web/paseos/delta-y-rio-de-la-plata/
Para más información puede visitar http://paseosenbarco.com.ar/web/paseos/delta-y-rio-de-la-plata/